viernes, 10 de febrero de 2012

GRACIAS





10 Febrero 2012
Teatro Quintero

¡REPETIMOS!


Hace cuatro meses descubrimos, casi por casualidad, una gran obra: POR LOS PELOS


Esta noche, por cortesía de la compañía, hemos podido disfrutar nuevamente de tan grato espectáculo.


Y si escribir sobre ellos es difícil (pues su talento hay que verlo y no leerlo, por muy filólogos que seamos) más difícil resulta escribir para ellos, sabiendo que volverán a leernos...pero lo prometido es deuda.


Sentaditos, nerviosos y expectantes, así recibíamos, escena a escena, las peripecias acaecidas en el salón de estética: risas, gestos, guiños, ocurrencias...todo cabe en el cuaderno de notas que mentalmente sabíamos que debíamos fabricar.
Cada representación es distinta; de cada una se extraen nuevas conclusiones; y las mismas escenas brillan ya con los colores de otra luz.
Pero ha sido inevitable: las carcajadas escapaban de nuestro control, volviendo a reír en las mismas escenas, asintiendo ante las pistas de un crimen que sabíamos ya resuelto...

¿Novedades?
Algunas...como por ejemplo un nuevo rostro para el personaje de Miki, el atolondrado policía en busca del famoso punto G...

La conjunción directa espectador-personaje al subir a escena una señora para realizar una llamada de teléfono y comprobar así una posible coartada...

Nosotros...ya no éramos los "inocentes" espectadores en busca de pruebas y testimonios, sino los jueces acusadores que jugaban con ventaja: la información es poder.

Y el estilismo, enhorabuena a quienes se encarguen de caracterizar a los personajes: han vuelto a conseguirlo.



¿Espinita?
Alicia.
Me quedo con las ganas de haber disfrutado el cambio de registro en el personaje de Luján, la reacción de la serenísima Pitita o la que adivino difícil captura de López.
Pero me llevo, una vez más, la satisfacción de haber visto a Eva hacer dos Alicias distintas, la "mala", cuando más inocente parecía: vulgar, fácil, simple, inofensiva; la "buena", con las manos manchadas de culpabilidad, pero llena de sentimientos puros, humana, pasional, sincera. Enhorabuena, Eva.


¿Experiencia?
Indescriptible, pero, como buena oradora, seguiré el ejemplo de Miki:

Punto a) Gracias a Laura, mi tocaya querida, por habernos descubierto, por leernos, por contactar con nosotros, por las fabulosas invitaciones, por cuidarnos tanto, por su exquisito trato. Habiéndote conocido hoy, en realidad, me daba la sensación de estar charlando con una amiga de toda la vida. Personas como tú hacen la vida más fácil, y los sueños más cercanos. Además, algo con lo que no contábamos, un séptimo personaje: tu intervención (cuasi en off) en escena, tan oportuna para la inocencia de la señora.


Punto b) Gracias a Luján, el personaje que me conquistó en la primera representación y que ha vuelto a maravillarme hoy. Pero sobre todo gracias a Marcelo, por desvelarme el secreto mejor guardado de tu personaje (tu posible culpabilidad) y por presentarme a tus compañeros como "esta es Laura, la que escribió nuestra crítica en el facebook".
Haber escrito para nosotros algo sobre vosotros y que seáis vosotros los que nos lo agradezcáis sólo es posible gracias a la magia del teatro (perdón por el juego de pronombres).


Punto c) Gracias a Eva, por volver a demostrar la riqueza de tu personaje y el talento de tu persona. Lo que en principio, al conocer el resultado de la votación, fue una reacción frustrante, se convirtió al instante en un unánime "merece la pena que haya salido ella, lo hace genial".


Punto d) Gracias a Nico (Romero, Tomillo, alguacil o capitán), porque, además de poner la guinda a la foto sacando la placa (¡qué arte tienes!) me has alegrado la noche con tus amables palabras. Espero que también esta humilde entrada de blog te arranque alguna sonrisa en los días grises.


Punto e) Gracias a María José de los Monteros y de la Mar Serena, que me ha resuelto las dudas sobre el contenido de las misteriosas bolsas rojas, pero...¿eran prendas compradas o robadas? Sé de sobra que cuando mi madre disfrute el jueves de su regalo de cumpleaños (vuestra representación) te convertirás en su personaje favorito. Parece que en la obra se realza la culpabilidad de quienes más inocentes parecen (Alicia) quedando impunes los delitos más evidentes, como meter un perfume (y hasta las tijeras) en el bolso y salir airosa.


Punto f) Gracias a López, a por quien habíamos decidido ir hoy (intentando descubrir un final distinto). La teoría del suicidio parece una locura, una invención propia de quien intenta librarse echándole "el muerto" a otro, una excusa rápida y algo patética (como las de mis alumnos antes de un examen) que sólo remarcaría tu grado de culpabilidad.

Sería distinta la propuesta que hacía uno de los nuestros: Isabel se suicidó (tal vez con algún veneno o pastillas) y alguno de los personajes (TÚ) logra que las tijeras en la garganta de la difunta arrastren a la cárcel a Alicia o a Luján. ¿Quién sería la víctima entonces? ¿contra quién irías tú? ¿contra Alicia? Si Isabel decidió cambiar el beneficiario del testamento la noche antes de su muerte, ¿quién heredaría ahora la fortuna? ¿tú?
(Si todo esto se nos llega a ocurrir antes tal vez ahora estarías en chirona)


Punto g) Supongo que Miki lo sigue buscando...


Mil gracias a todos por esta oportunidad de disfrutaros de nuevo, pero sobre todo mil gracias por la charla del final, pues además de responder a tooooodas las preguntas de Víctor, lograr hacernos la foto juntos y resolver algunas dudillas pendientes, habéis añadido una experiencia a nuestra lista de "momentos teatrales". No todos los días se tiene la oportunidad de discutir los matices de un personaje con los actores que le dan vida.
Si hace cuatro meses os agradecíamos las risas, hoy os agradecemos la seriedad, profesionalidad y cariño con el que nos habéis tratado.
Nos habéis acercado a la práctica de la materia con la que trabajamos de una manera teórica, dándole vida. Eso es el teatro.
Adiós a la cuarta pared. GRACIAS.



Os deseamos (aunque no la necesitéis) toda la suerte del mundo.
Os seguimos recomendando a nuestros amigos (ya os he mandado a unos cuantos).
Y esperamos volver a veros pronto, muy pronto, y como dijo Pirandello:

Así será, si así os parece

sábado, 4 de febrero de 2012

El país de las gominolas




De todos los cuentos de la infancia, el más inofensivo era, sin duda, aquel del flautista que se llevaba a los niños prometiéndoles dulces, helados, caramelos, al son de su musiquilla...el malo era el alcalde (que no pagó al flautista su labor de desratización)...las víctimas los padres...¿los padres? la víctima era aquel pobre niño cojito de la historia que no pudo alcanzar a los demás, aquel que no llegaría nunca al paraíso prometido, aquel que quedaría durante muchos años como el "único niño del pueblo"...tuvo que ser horrible para él, condenado a vivir en soledad en el mundo de los adultos...

Los demás...¿qué fue de los demás? ¿alcanzarían Chuchelandia? ¿o caerían por un barranco como las ratas de la historia?

¿Existe ese paraíso terrenal? ¿es posible alcanzar el "país de las gominolas"?

Dedico mi entrada de hoy a todos aquellos que seguís buscándolo, aquellos que aún soñamos con encontrar un lugar mejor o con regresar al ideal perdido...

Rafa, algún día encontrarás la estabilidad que todos necesitamos...y podrán leer poemas en clase...

María Jesús, en algún centro tus grandes dotes profesionales serán valoradas...

Juan Ca, llegará el día en que sólo hagas la maleta para coger aviones y los kms sólo serán un mal recuerdo del pasado...

Marga, intentaré volver...te lo prometo...



Hasta entonces, hagámoslo lo meor posible, mientras las hojas caen del calendario y los puntos de multiplican en nuestros baremos...


Metamos en el maletín del profe paciencia y cordialidad...